Los murales vienen con un respaldo adhesivo que permite que se adhieran fácilmente a las paredes u otras superficies planas sin necesidad de utilizar pegamento adicional. Esta característica simplifica el proceso de instalación, lo que significa que cualquiera puede transformar su espacio sin requerir habilidades especiales o la ayuda de un profesional. Además, esta facilidad de aplicación permite que los murales autoadhesivos sean una opción práctica y conveniente para la decoración del hogar, la oficina o cualquier otro entorno.